Radiofrecuencia corporal
El tratamiento de Radiofrecuencia para mejorar la celulitis y la flacidez actúa del siguiente modo:
- La Radiofrecuencia produce un calentamiento profundo que afecta a la piel y tejido graso subcutáneo.
- Dicho calentamiento va a favorecer el drenaje linfático lo cual permitirá disminuir los líquidos y toxinas en el que se encuentran embebidos los adipocitos del tejido afecto de celulitis.
- A su vez se producirá un aumento en la circulación de la zona que permitirá mejorar el metabolismo tanto del tejido graso subcutáneo como la mejora del aspecto de la piel acompañante.
- Y por último y más importante la Radiofrecuencia provoca la formación de nuevo colágeno tanto en la piel como en el tejido subcutáneo permitiendo que todo el tejido adquiera firmeza gracias a la reorganización de los septos fibrosos y engrosamiento dérmico suprayacente.
- La disminución de volumen se justifica tanto por la reducción del edema, como por la compactación a través del tejido conectivo contribuyendo a la reducción volumétrica.
Duración del tratamiento de Radiofrecuencia
En cuanto a la duración del tratamiento, es un tiempo variable dependiendo del área a tratar. Las zonas pequeñas como brazos o abdomen suelen realizarse en 25-30 minutos, zonas más amplias como trocánteres (cartucheras) pueden prolongarse 45-50 minutos por sesión.
El procedimiento es sencillo. Previo a la sesión se marca la zona y cuadricula con un rotulador quirúrgico. Una vez terminada la sesión se aplica gel de aloe vera en las zonas tratadas y el paciente puede incorporarse a su vida cotidiana de inmediata, evitando el sol y UVA las siguientes 24-48 horas.
El número de sesiones es variable pero se consideran necesarias entre 8 y 12 distanciadas un mínimo de una semana. El procedimiento es muy bien tolerado y no precisa anestesia.
Beneficios de la Radiofrecuencia para el tratamiento de la celulitis y la flacidez
En síntesis, la Radiofrecuencia es una alternativa terapéutica para la celulitis y flacidez corporal por ser un método que mediante un calentamiento profundo y controlado que afecta a la piel y tejido celular subcutáneo.
Va a provocar una cascada de reacciones que llevan consigo la colagénesis (tensando la piel y los septos fibrosos), drenado del éxtasis linfático de la grasa, mejora de la circulación de la piel y tejido subcutáneo con la consiguiente disminución del aspecto de la piel de naranja y mejora de la flacidez a la vez que se produce una reducción volumétrica del área tratada.
Sin olvidar que nos enfrentamos a dos patologías muy complejas en las que la combinación con otras técnicas suele mejorar los resultados.
En cuanto a la duración del tratamiento, es un tiempo variable dependiendo del área a tratar. Las zonas pequeñas como brazos o abdomen suelen realizarse en 25-30 minutos, zonas más amplias como trocánteres (cartucheras) pueden prolongarse 45-50 minutos por sesión.
El procedimiento es sencillo. Previo a la sesión se marca la zona y cuadricula con un rotulador quirúrgico. Una vez terminada la sesión se aplica gel de aloe vera en las zonas tratadas y el paciente puede incorporarse a su vida cotidiana de inmediata, evitando el sol y UVA las siguientes 24-48 horas.
El número de sesiones es variable pero se consideran necesarias entre 8 y 12 distanciadas un mínimo de una semana. El procedimiento es muy bien tolerado y no precisa anestesia.
Beneficios de la Radiofrecuencia para el tratamiento de la celulitis y la flacidez
En síntesis, la Radiofrecuencia es una alternativa terapéutica para la celulitis y flacidez corporal por ser un método que mediante un calentamiento profundo y controlado que afecta a la piel y tejido celular subcutáneo.
Va a provocar una cascada de reacciones que llevan consigo la colagénesis (tensando la piel y los septos fibrosos), drenado del éxtasis linfático de la grasa, mejora de la circulación de la piel y tejido subcutáneo con la consiguiente disminución del aspecto de la piel de naranja y mejora de la flacidez a la vez que se produce una reducción volumétrica del área tratada.
Sin olvidar que nos enfrentamos a dos patologías muy complejas en las que la combinación con otras técnicas suele mejorar los resultados.